Miguel Sancho Gómez Damas (Torredonjimeno, Jaén; 5 de junio de 1785 - Burdeos, Francia; 1864) fue un militar español. Posiblemente uno de los militares con más pericia de su época.
Tal pericia militar le hizo merecedor del marquesado de Orbaiceta en recuerdo de la conquista de la Real Fábrica de Armas por las tropas carlistas en 1834 y donde se distinguió valerosamente.
En el libro "Títulos del reino concedidos por los monarcas carlistas" escrito por el Rey de Armas D. Vicente de Cadenas y Vicent se describe el escudo nobiliario
Marqués de OrbaicetaDon Carlos V, en 1834, a don Miguel Gómez, Coronel y Jefe de Estado Mayor del Ejército Real de Navarra.
Armas: En Plata, cinco escudetes de azur, cargados de una flor de lis, de plata,cada uno.
Alfonso Bullón de Mendoza en su libro " La Expedición del General Gómez" duda de la existencia de tal título ya que Gómez nunca hizo uso de él atribuyendo el marquesado a un error de Vicente de Cadenas al creer "que don Carlos pensase otorgar el título a Gómez y luego no lo hiciese debido a las circunstancias bélicas" extrañándose que Gómez no lo utilizase al menos entre 1834 y 1836.
Mi opinión disiente al creer que que el título no fue expedido en 1834 sino en los últimos meses de 1836, sin señalar día ni mes,como recoge Vicente de Cadenas en el Indice Cronológico con el que cierra el libro haciéndome suponer que Gómez no tuvo conocimiento cierto del nombramiento nobiliario ya que se encontraba en su famosa campaña muy alejado de la Corte carlista. El inexplicable proceso que se le siguió a Gómez inmediatamente a la llegada de su Expedición le aparejó el alejamiento de todos sus cargos y honores en el ejército carlista unido a las consecuencias del Abrazo de Vergara y al largo exilio francés hicieron que Gómez no hiciese uso el título en vida pero tampoco su título fue anulado porque nunca hubo sentencia en su proceso.
La promulgación en 1947 de la Ley de Sucesión de la Jefatura del Estado, hizo que España se convirtiera de nuevo en Reino y el Jefe del Estado el general Francisco Franco se atribuyera el derecho a reconocer y conceder títulos nobiliarios.
La Ley de 4 de mayo y el Decreto de 4 de junio del mismo año permitieron el restablecimiento de la legislación nobiliaria que había sido derogada por la Segunda República. La aportación más interesante es el reconocimiento de los títulos concedidos por los reyes carlistas.
En los años cincuenta del siglo XX el Ministerio de Justicia se dirigió a los herederos de D. Fernando Gómez Arrabal, sus hijos D. Jaime, Dª Asunción, Dª Beatriz, D. Fernando y Dª Eva Gómez Moya,todos ellos nacidos y residentes en Torredonjimeno, como sucesores por derecho genealógico al referido título nobiliario cuyo expediente se encontraba en el Ministerio de Justicia para que quien de ellos se considerase con mayor derecho pudiese rehabilitar el marquesado. Ninguno de ellos lo hizo.
Hace unos años yo mismo hice gestiones en el Ministerio para probar la existencia del título y tras exponer mi petición a la funcionaria que me atendió estuve esperando dos horas hasta que terminó de revisar el expediente. Al cabo me comunicó que el expediente del título se hallaba en el Archivo de Títulos Nobiliarios y que debía ser rehabilitado por quien le correspondiese para poder ser ostentado lo que prueba que dicho título fue creado y concedido al general Gómez aunque él no pudo utilizarlo sus descendientes pueden hacerlo.